Has cuidado con esmero de tu jardín durante todo el verano para disfrutarlo a pleno. Y un buen día, desde tu reposera, lo observas y te planteas la cuestión: "¿Qué es mejor césped natural o artificial?" Pues te ayudamos a echar un poco de luz sobre el tema.
Primero es importante determinar dónde nos planteamos instalarlo: en la terraza, el jardín, en una zona determinada, por ejemplo, con juegos infantiles o una piscina desmontable o en la parte exterior de una vivienda.
Ahora veamos la ventajas y desventajas de cada uno.
Césped natural
Ventajas
- Por regla general, nos gusta contar con vegetación natural en nuestro jardín.
- El aspecto al tacto y al olfato es más agradable.
- Ayuda a mantener fresco los espacios.
- El coste de instalación es más barato. Se colocan rollos o terrones, porciones de tierra con hierba natural dispuestas en el suelo. También se puede sembrar.
Desventajas
- Para su mantenimiento necesita tiempo y dedicación: regar, cortar, abonar, replantar. Si te gusta cuidar tu jardín y puedes dedicarle tiempo no es un problema. En caso contrario tendrás que contratar un profesional que haga el mantenimiento.
- Regarlo es imprescindible para su buen estado. Esto encarece la factura del agua. En zonas de clima seco la necesidad de riego aumenta.
- En zonas de climas fríos, en invierno, tendrás que prepararlo para que soporte las heladas y no adquiera un aspecto desolador y deteriorado.
- Como cualquier otra planta, puede coger enfermedades y plagas que hay que tratar.
- Sólo puedes instalarlo en superficies naturales.

Césped artificial
Césped artificial
Ventajas
- Ahorras tiempo y dinero es su mantenimiento. Sólo necesita cuidados básicos de limpieza. Te evitas el riego y el cuidado con plaguicidas, abonos, etc.
- Ahorras agua y contribuyes a un desarrollo sostenible del medio ambiente.
- Es antialérgico y no acumula bacterias ni insectos.
- Se puede instalar en espacios abiertos ya cementados o pavimentados.
Desventajas
- Es sintético, aunque parezca real.
- La instalación y la inversión inicial es más elevada. Se calcula que en un año se puede amortizar el gasto.
- El deterioro del color y el aplanamiento de las hebras dependerá de la calidad de césped sintético que elijas y de una buena instalación.
- En verano tiende a sobrecalentarse más que un césped de hierba natural.
Ya hemos echado luz sobre el tema. Ahora te toca a ti decidir porque sobre gustos no hay nada escrito. Eso sí, sácale punta al lápiz, haz tus cuentas, elabora un checklist de las ventajas y desventajas según sea tu realidad y la decisión será más fácil.